El calentamiento es el resultado natural del proceso de fermentación que ocurre durante el ensilado. Sin embargo, a veces este proceso se puede volver inestable, con calentamiento significativo. Al ocurrir esto, se puede perder valiosa materia seca (MS), de manera especial, nutrientes vitales.
La inestabilidad aeróbica en el ensilado puede ser a consecuencia de las levaduras de deterioro, las que pueden ocasionar aumentos en el pH del forraje. A su vez, esto permite la descomposición adicional por mohos y bacterias indeseables. Donde la descomposición está visible, allí ya se han producido pérdidas significativas de MS y aumentos en la temperatura.
Cada aumento de 8ºC de la temperatura en una tonelada de ensilado con 30% de MS requiere más de 12.6 kcal de energía. Esto termina costando a los productores alrededor de 9 litros perdidos en la producción de leche por tonelada de ensilado. Además, los costos del alimento aumentan debido a la pérdida de MS y mayor cantidad de rechazos del alimento.
El calentamiento puede ocurrir:
1) Durante el llenado y poco después de que el silo ha sido sellado los microorganismos comienzan a crecer y producen calor de manera natural, debido a los procesos bioquímicos exotérmicos (que generan calor). Una vez consumido el oxígeno dentro del ensilado, la tasa de aumentos de temperatura disminuye. La temperatura durante el ensilado depende de la disponibilidad del oxígeno y los tipos de microorganismos que dominan en el cultivo.
2) Después que se abre el silo, la exposición al oxígeno reactiva el crecimiento de levaduras, lo que produce el calentamiento. La intensidad y la velocidad de este calentamiento dependen del nivel de levaduras y mohos presentes, la velocidad con la cual se retire el material ensilado del silo, y las condiciones ambientales.
Para poder evitar el calentamiento del ensilado y las consecuentes pérdidas de MS, utilice un inoculante de forraje comprobado por la investigación que impulsará la fermentación eficiente del ensilado al inicio, tales como Sil-All® 4×4. Además, los inoculantes que contienen Lactobacillus buchneri 40788, como Biotal®Buchneri 40788, a una dosis eficaz pueden ayudar a encarar los desafíos de estabilidad. De hecho, la alta tasa de dosificación de L. buchneri 40788 es el único agente microbiano activo examinado por la FDA y permitido de afirmar eficacia en la prevención del crecimiento de levaduras y mohos en los ensilados y el maíz con alto contenido de humedad (HMC).
Los productores asimismo necesitan mantenerse al corriente de la actividad de manejo del ensilado. Hay que compactar y llenar los silos y bunkers correctamente para eliminar el exceso de oxígeno, y sellar los silos tan pronto sea posible después del llenado. Todas las superficies expuestas tienen que ser cubiertas y selladas por completo y con eficacia. Por último, extraiga el ensilado de manera correcta y segura, practique un buen manejo de la cara y la extracción del alimento y asegúrese de que la ración esté debidamente balanceada.
