Usemos nuestros cinco sentidos para valorar las becerras

PUNTOS A REVISAR PARA DETECTAR UNA ENFERMEDAD O UN MALESTAR

Ing. Joel H. Velasco Molina
Asesor Técnico de ABS México

Dios nos dio, a la mayoría de los humanos, el don de contar con cinco sentidos; a saber:

1) La Vista;
2) El olfato;
3) Eloldo;
4) El tacto,
5) El gusto.

Desafortunadamente en ocasiones hay que desaprovechar esta valiosa herramienta, esto es, el uso cabal de los cinco sentidos, cuando estamos valorando las becerras.

No obstante, al llevar a cabo la valoración de una becerra, buscando conocer su estado de salud, regularmente nuestro enfoque toma base en:

1) La cabeza (ojos, nariz, hocico, lengua, cuernos),
2) El tórax,
3) El abdomen,
4) La piel-pelo,
5) Las articulaciones,
6) El ombligo,
7) El ano,
8) Las tetillas y
9) La postura.

Usemos nuestros cinco sentidos para valorar las becerras sentidos abs

¿QUÉ PODEMOS CHEQUEAR USANDO NUESTROS SENTIDOS?

Con la vista

Valiéndonos de nuestros ojos es factible mirar:

  • En los ojos, la presencia de una conjuntivitis (pink eye), de lagañas, hundimiento ocular (por deshidratación), laceraciones, etc.
  • En la nariz (los hollares) puede notarse la presencia de moco purulento, turbio, verdoso o con sangre, etc..
  • Las orejas a veces se presentan caldas, frías, con supuración (pus); o tienen parásitos como garrapatas, piojos, etc.
  • En el hocico y/o la lengua pueden apreciarse estomatitis (aftas en la mucosa bucal), gingivitis (encías inflamadas), inflamación de la lengua, etc.
  • En el tórax es fácil distinguir una disnea (dificultad en la respiración).
  • En el abdomen es notorio cuando se consigna meteorismo (distensión abdominal por gases) ruminal u abomasal, o que está vacío (falta de comida).
  • La piel y/o el pelo: el color de la piel puede estar pálida, rojiza, azulada o amarilla; pueden aparecer verrugas (papilomas), tiña (hongos). alopecia (calda del pelo). decoloración del pelo, lesiones, etc.
  • En las extremidades anteriores a veces se encuentra artritis del carpo (rodilla con hinchazón).
  • En el ombligo se presentan hernias o abscesos
  • Los cuernos, a veces presentes. se hallan dañados, infectados.
  • En el ano se hacen evidentes signos de diarrea infecciosa o mecánica.
  • Las tetas pueden reportar anormalidades, o ser tetas supernumerarias (extras); o mostrarse chupadas o con mastitis.
  • La postura de la becerra se encuentre ésta echada o parada puede evidenciar problemas de locomoción, de tipo nervioso, etc.
  • Con la vista también se logra monitorear en peso, la estatura y fa condición corporal de las becerras; chequear con el termómetro la temperatura corporal. Asimismo es factible evaluar el confort de las becerras.

Con el olfato

Afinándolo es fácil percibir:

  • Olores anormales en las heces fecales. en las supuraciones, etc.
  • Aliento con olor acético (manzana fermentada).
  • Concentración de gases en el entorno (amoniaco, ácido sulfhídrico, metano, gasolina, pintura fresca, etc.).
  • Alimentos rancios (concentrado). agrios (leche o calostro acidificados).
  • Alimentos contaminados con insecticidas.
  • Presencia de animales muertos (roedores, pájaros, gatos. perros, etc.).

Con el oído

Haciendo buen uso de nuestras orejas podremos escuchar:

  • Ruidos respiratorios.
  • Tos.
  • Quejidos.
  • Sonidos timpánicos o metálicos en la percusión del rumen (panza) o el abomaso (cuajar).
  • Rechinido de dientes.
  • Ruidos de motores.
  • Presencia de animales depredadores (coyotes, perros, etc.).

Con el tacto

Con el tacto sentimos las cosas que tocamos y, por tanto, podemos:

  • Saber si existe deshidratación en una becerra, pellizcando la piel del cuello entre indice y pulgar, para verificar el tiempo que tarda la piel a adoptar su posición plana normal.
  • Cerciorarnos si hay una hernia en el ombligo de la becerra, introduciendo el o losdedos en el orificio umbilical.
  • Chequear si una becerra recién nacida en un parto gemelar junto conun macho es estéril (freemartin) al
    introducir un dedo por la vagina.
  • Explorar los ganglios (mandibulares, parotideos, retrofaringeos mediales. preescapulares, precrurales y supramamarios) para verificar posibles cambios de contornos normales causados por aumento del tamaño, lo que puede dar indicios de alguna condición patológica.
  • Hacer una exploración táctil de un tumor.
  • Averiguar mediante la percusión del abdomen distendido algún padecimiento del rumen o del abomaso.

Con el gusto

Aunque raras veces. se podría practicar alguna prueba de degustación de algunos alimentos para las becerras. Por ejemplo paracerciorarnos de si una leche y/o un calostro no están acidificados; o para percatarse del sabor de un sustituto de leche (que debe tener un sabor lechoso), es decir, darse cuenta de si–·presentando un sospechoso color anaranjado-café— no ha sido dañado por el calor; o poseer un sabor amargo lo cual indica grasa rancia. Como cierre de esta mi contribución creo que vale la pena recalcar que si ustedes, estimados lectores, hiciesen cabal uso de sus cinco sentidos. en la valoración de sus becerras, podrlan proporcionarle a su Médico Veterinario de confianza una información de gran valla, y entonces—en equipo··· estarían en posición, muy oportuna, de reconocer: 1) Los problemas de salud de dichas becerras y evitar que estos prosperen, y por otra parte, 2) Identificar aquellos factores que pueden incidir negativamente en el comportamiento y la bioseguridad animal.

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