Rotavirosis Porcino, un problema en salud pública

M. en C. Mariana Pérez Rivera.
Candidata a Doctora en Ciencias.
[email protected]

M. en C. Saúl Reveles Félix

PMVZ. Martha Selene Quintana Sánchez.
[email protected]

Introducción

Los agentes infecciosos son los principales causales de enfermedad en todo el mundo y en las producciones porcinas no son la excepción. Los cuadros gastrointestinales provocados por microorganismos han ganado importancia dentro de la porcicultura, al ser de los padecimientos más frecuentes e importantes en lechones, provocando altas tasas de morbilidad y mortalidad, las cuales pueden llegar hasta el 100% en camadas antes del destete(1). Los microorganismos que afectan a los cerdos suelen ser de origen bacteriano (p. ej. E. coli, Salmonella, Lawsonia), parasitario (p. ej. coccidiosis) o viral, éstos últimos los más difíciles de controlar, muchas veces, teniendo que convivir con ellos dentro de la granja(2).

Entre las enfermedades gastrointestinales a las que se les ha dado mayor importancia en la porcicultura están las causadas por los Coronavirus como el virus de la Diarrea Epidémica Porcina (vDEP), el virus de la Gastroenteritis Transmisible (vGET) y recientemente el Deltacoronavirus Porcino (PDCoV)(2,3). Además de éstos, existen otros agentes como por ejemplo el Rotavirus Porcino (RVP)(2), al cual se le ha restado importancia, sin embargo, no deja de tener menor significancia tanto para los sistemas de producción, como en aspectos de salud pública. El RVP se ha encontrado por sí solo asociado con cuadros diarreicos en todas las etapas de la producción, y aunque se considera que la mayoría de las veces no es detectado, por la falta de presentación de signos clínicos (por presentarse de manera subclínica), llega a mermar la producción, debido al retraso en el crecimiento de los cerdos(2). De igual manera se ha encontrado que cuando existe una coinfección del RVP con algún otro virus (como los coronavirus), o con bacterias (como E. coli) se puede desencadenar una mayor alteración patológica en los cerdos, y aumenta el impacto económico por un síndrome entérico(4).

Rotavirosis Porcino, un problema en salud pública Rotavirosis Porcino 1
Foto 1. Piso de jaula con heces diarreicas.

Antecedentes del Rotavirus

Los primeros reportes de los Rotavirus se realizaron en EUA en 1943 por Ligths y Hodes, los cuales encontraron que estos agentes eran los responsables de provocar diarreas en bovinos jóvenes. Treinta años después (1973), en Australia fueron descubiertos en niños que presentaban cuadros diarreicos, esto hecho por Bishop y sus colaboradores. Pero no fue hasta dos años después, que Woode y Bridge realizaron el primer reporte de rotavirus en cerdos en Inglaterra, descubriendo así la patogenicidad que les causaba y la importancia que representaba(5).

En México se comenzó a trabajar con los rotavirus en animales desde el año 1985. Sin embargo, no se han realizado muchos estudios sobre este virus, y la información que se tiene no está actualizada. Se sabe que existe la presencia de tres tipos de rotavirus porcinos (A, B y C) de los cinco tipos que han sido aislados en cerdos (A, B, C, E y H) en otros países(6,7). De igual manera se ha descrito la presencia en infecciones mixtas con bacterias como Lawsonia intracellularis y E. coli(8,9). En un estudio realizado en el 2004, donde se analizaron 243 muestras de materia fecal en cerdos, provenientes del estado de Yucatán, se encontró que el 3.3% de estos animales era positivo para RVP tipo A, esto a través del método de ELISA directa(10).

Rotavirosis Porcino, un problema en salud pública Rotavirosis Porcino 2
Foto 2 y 3. Lechones con diarrea y pérdida de peso.

Presentación clínica

El cuadro clínico que provoca la infección por RVP se caracteriza por severas diarreas acuosas, vómitos, deshidratación, depresión y fiebre, principalmente en lechones (Foto 2 y 3). Este cuadro conlleva a un rápido deterioro de los animales y retraso en el crecimiento.

Al igual que varias enfermedades virales entéricas porcinas, las tasas de morbilidad y mortalidad son muy elevadas, alcanzando el 100%, esto probablemente se ve favorecido porque la eliminación del virus a través de las heces de los animales infectados puede durar hasta 14 días después de recuperados del cuadro clínico(2,12). Los animales en etapas posteriores al destete e incluso los pie de cría, no están exentos de la infección, sin embargo, la enfermedad en estos animales suele cursar de manera asintomática o subclínica(2).

Importancia de la enfermedad

Los rotavirus además de estar distribuidos mundialmente se encuentran presentes en una amplia gama de hospederos, incluyendo el humano, dándole importancia en salud pública y veterinaria. Hasta el momento se han descrito 10 grupos de rotavirus (A-J), sin embargo, en cerdos solo se han encontrado cinco de ellos (A, B, C, E y H), de éstos, los primeros cuatro se han asociado a cuadros diarreicos(7).

Tabla 1. Medidas básicas de bioseguridad por nivel de tecnificación en granjas porcinas.

Medidas de bioseguridad Granjas de traspatio Granjas semitecnificadas Granjas tecnificadas
Malla perimetral x x
Arco sanitario para vehículos x
Arco sanitario para personas x
Vado sanitario x x
Tapete sanitario x x x
Regaderas al ingreso de la granja x
Ropa de trabajo x x x
Calzado de trabajo x x x
Uso de desinfectantes x x x
Limpieza de instalaciones x x x
Cuarentena x
Vacunaciones x x x
Control de excretas x
Área para eliminación de residuos orgánicos x x
Agua potable x x x
Control de fauna nociva. x x

Los rotavirus del grupo A son considerados los más importantes clínicamente, ya que presentan mayor patogenicidad tanto en animales jóvenes y niños(13). Se ha demostrado que la infección por rotavirus tipo A es la que se presenta con mayor frecuencia en las granjas porcinas, así como la que causa más atrofia en las vellosidades y diarreas más severas pudiendo encontrarse en infecciones mixtas con otros agentes o con otros grupos de rotavirus(12).

Debido a que no existe alguna vacuna con licencia en el país para la administración en cerdos, la mejor manera de controlar la rotavirosis es mejorando la bioseguridad dentro de la granja, así como la administración de antibióticos de amplio espectro para combatir las infecciones secundarias de origen bacteriano. En la tabla 1 se presentan las principales medidas de bioseguridad a tomar en cuenta, dependiendo el tipo de sistema de producción porcina.

Diagnóstico

Debido a la gran similitud del rotavirus con otras enfermedades entéricas se recomienda realizar el diagnóstico en el laboratorio, el cual se lleva a cabo a partir de muestras de intestino o heces principalmente. Para llevar a cabo el diagnóstico existen varias técnicas, las que detectan al virus como la microscopía electrónica, la electroforesis en gel de poliacrilamida (PAGE), la detección del material genético por medio de la RT-PCR(3), aglutinación en látex, detección de antígenos por inmunocromatografía, aislamiento viral, inmunofluorescencia indirecta, etc. Y las pruebas serológicas que detectan a los anticuerpos como la prueba inmunoabsorbente ligada a enzimas (ELISA).

Rotavirosis Porcino, un problema en salud pública Rotavirosis Porcino 3
Foto 2 y 3. Lechones con diarrea y pérdida de peso.

Sin embargo, en México muy pocos laboratorios realizan el diagnóstico para el RV porcino y se realiza principalmente RT-PCR debido a que es una prueba altamente sensible y específica.

Implicaciones en Salud Pública

Se ha demostrado que los rotavirus tienen potencial zoonótico, es decir, que pueden ser transmitidos de animales enfermos a personas que tienen contacto con ellos(14); en varios países como España, Italia y Taiwán, por mencionar algunos, han encontrado genotipos de origen animal (principalmente porcino y bovino) en cepas de rotavirus humano, lo que refuerza la posible transmisión entre especies(15,16) planteando un problema de salud pública.

Debido a que cepas porcinas se han encontrado en diversos animales se cree que los cerdos pudieran actuar como reservorios del virus, y actuar como la fuente de cepas emergentes en humanos y animales(17). Esto toma especial importancia en producciones familiares o de traspatio, donde la convivencia de animales de diferentes especies es frecuente y las medidas de higiene son limitadas.

En humanos, los rotavirus son muy diversos, principalmente por la gran recombinación entre los serotipos de la misma cepa o de diferentes cepas(18), ocasionando que se encuentren genotipos en humanos que antes solo se encontraban en animales. Esto se da gracias a las características propias del genoma del virus que al ser segmentado, es viable que fragmentos de virus de una especie se combine con la de otra especie al estar presentes en el mismo organismo en el mismo momento (Figura 1).

Desde hace años se ha reportado que la rotavirosis es la principal causa de gastroenteritis severa en animales jóvenes y niños menores de 5 años de edad en todo el mundo, ocasionando aproximadamente 450,000 muertes al año (https://www.who.int/immunization/ diseases/rotavirus/es), generalmente en poblaciones que se encuentran en países en vías de desarrollo. La causa de mortalidad en los niños es básicamente por deshidratación, el daño provocado en el intestino, principalmente en el delgado, por el rotavirus, lleva a una diarrea severa durante 2 hasta 8 días, que hace que los niños pierdan gran cantidad de líquidos. El tratamiento, al igual que en los animales, se basa en mantenerlos bien hidratados, así como disminuir molestias como dolor o vómito.

En México, las enfermedades diarreicas son la segunda causa de atención médica en niños menores de cinco años y se encuentra dentro de las primeras cinco principales causas de mortalidad a nivel nacional(19,20). La rotavirosis se presenta generalmente en meses fríos y para la prevención existen dos tipos de vacunas:

  • Rota Teq (polivalente), 3 dosis a los 2, 4 y 6 meses de edad.
  • Rotarix (monovalente), 2 dosis a los 2 y 4 meses de edad.

Ambas vacunas forman parte del Esquema de Vacunación en México y su administración es vía oral (https://www.gob.mx/salud/articulos/vacuna-antirrotavirus).

Conclusiones

Debido a la relación cercana entre humanos y animales se puede facilitar la transmisión de rotavirus entre especies, creando virus conformados por segmentos de RNA de diferentes especies; éstas combinaciones de cepas podrían ser más fácil de adaptarse y propagarse a los humanos debido a la falta de una vacuna específica, lo que conlleva al monitoreo de la enfermedad tanto en animales y humanos, así el desafío de implementar nuevas estrategias de vacunación.

En México la mayor parte de la investigación sobre rotavirus porcinos se centra en medidas de control y preventivas, sin embargo, no se ha estudiado esta interacción entre rotavirus porcinos y humanos, por lo cual es importante saber si los casos reportados en humanos tuvieron su origen en cerdos u otros animales y así poder tomar medidas de bioseguridad y control tanto en animales como en humanos.

BIBLIOGRAFÍA

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Artículo publicado en Los Porcicultores y su Entorno Enero-Febrero 2019

Fernando Puga
Fernando Pugahttps://bmeditores.mx/
Editor en BM Editores, empresa editorial líder en información especializada para la Porcicultura, Avicultura y Ganadería.
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