Causas de la renquera

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Dado que son varias las causas de la renquera, suelen dividirse en tres categorías: mecánicas, metabólicas y microbianas

Mecánicas Genética

Las deformidades anatómicas, tales como jarretes muy rectos, cuartillas débiles, jarretes falciformes, pezuñas dislocadas o superpuestas, pata de mula, pezuñas curvas o en tirabuzón, más de dos dedos, etc., pueden causar renquera o aumentar las probabilidades de que esta enfermedad se manifieste.

La genética no influye demasiado; sin embargo, puede ser un problema serio para aquellas vacas muy viejas.

Causas de la renquera Causas renquera 3Medioambiente

Un establecimiento mal diseñado puede tener un importante efecto en los índices de renquera de cualquier operación. Si: 1) los echaderos son poco confortables para echarse/levantarse; 2) faltan echaderos; 3) las vacas permanecen sobre el cemento por mucho tiempo (en pasillos y corrales de espera); 4) hay mucha distancia para desplazarse hacia la sala de ordeño; 5) hay poca inclinación en las zonas de circulación; 6) el cemento tiene una superficie inadecuada (o muy abrasivo o muy suave y resbaladizo); y 7) no hay ventilación en climas cálidos (lo cual aumenta el estrés), sin duda, se elevarán los índices de renquera.

Asimismo, estas causas también elevan los casos de renquera: 1) demasiadas vacas en los corrales de espera o cerca de las fuentes de alimentación; 2) ambientes húmedos o sucios (por ej.: restos de estiércol en pasillos y áreas de alimentación y desplazamiento); 3) falta de material en los echaderos o cambio del material con poca frecuencia; 4) cemento en vez de colchones debajo de los echaderos; 5) zonas irregulares (piedras y graval); 6) las vaquillas no deben pararse sobre el cemento antes del alumbramiento; 7) corte inadecuado de las pezuñas o con poca frecuencia; 8) demasiadas moscas (estrés); y 9) las vacas reciben un trato agresivo por parte de los ordeñadores (estrés).

Por lo general, ambas situaciones ambientales ocasionan casos de renquera (úlceras en la planta y enfermedad de la línea blanca).

Metabólicas

La laminitis es una inflamación del tejido corión que rodea al hueso inferior del dedo. Puede contribuir al 65% de los casos de renquera que se presentan en las fincas lecheras, y suele ser más común durante los primeros 100 días de lactancia. Puede originarse por un manejo inadecuado del ambiente y de la higiene, pero suele asociarse con mayor frecuencia a una nutrición deficiente. Una dieta alta en hidratos de carbono y bajas fibras produce acidosis ruminal subaguda (SARA), que luego puede llegar a provocar laminitis a través de una serie de reacciones que restringen el flujo sanguíneo hacia las láminas del corión y la pared de las pezuñas.

Microbianas

Dermatitis digital (verrugas peludas en las pezuñas)

La dermatitis digital (verrugas peludas) es una enfermedad dolorosa que debilita al animal y suele infectar la dermis de las patas. Si no se trata, resultará en renquera. Cheli y Mortellaro describieron la enfermedad por primera vez en Italia, en 1974, la cual ya se ha propagado por el mundo (registrándose más casos en los hatos más grandes). La causa es bacteriana, debido a la susceptibilidad de la enfermedad a los antibióticos, aunque no se han determinado con exactitud las especies que la provocan.

La dermatitis digital se debe a dos o más bacterias espiroquetas anaeróbicas y se manifiesta en forma de lesiones. Sin embargo, también puede presentarse otro tipo de bacterias no espiroquetas. Estos organismos patógenos pueden sobrevivir fuera del animal en ambientes húmedos, con barro, y son muy contagiosos. La dermatitis digital suele comenzar con una zona extremadamente dolorosa y rojiza rodeada por un borde o margen distinto de pelos erizados o aglutinados.

Suele hallarse por encima del espacio interdigital en la parte posterior de las patas traseras. A medida que avanza la enfermedad, la lesión tendrá una apariencia húmeda, de color gris verdoso y empezará a propagarse o proliferarse. En etapas  siguientes, la lesión tendrá una apariencia semejante a un papiloma o a una verruga, que puede estar rodeada de proyecciones filamentosas parecidas al pelo. Muchas veces, las lesiones se propagarán dentro del espacio interdigital entre los cuernos del talón, lo cual brindará un ambiente anaeróbico ideal para el desarrollo de organismos patógenos, especialmente con la acumulación de suciedad y restos de estiércol. Las lesiones pueden también aparecer más arriba alrededor del dedo rudimentario o en la parte delantera de la pata cercana a la banda coronaria. Estas lesiones frontales son particularmente
comunes en las patas delanteras y pueden ser muy dolorosas.

El intenso dolor que siente el animal con signos de dermatitis digital lo limitará para pararse y desplazarse, lo cual puede reducir los tiempos de alimentación. Esto, a su vez, afectará negativamente la producción lechera y podría incluso ocasionar una alimentación lenta, acidosis ruminal subaguda, y por ende, laminitis. Con frecuencia, la enfermedad estará asociada a la dermatitis interdigital, que ocasiona una erosión importante en el cuerno del talón (bulbo). También puede presentarse un
sobrecrecimiento de las pezuñas debido a un cambio en el uso del miembro.

Causas de la renquera Causas renquera 1

Dermatitis interdigital

La dermatitis interdigital (pudrición estable en las patas) es una infección de bajo grado de la dermis (capa más externa de la piel) de las patas y suele hallarse entre los dedos (espacio interdigital). Es frecuente en condiciones higiénicas inadecuadas, tales como barro y restos de estiércol, y suele ser más común en situaciones de confinamiento. Se caracteriza por medio de una dermatitis que puede llegar a formar costras. Esta enfermedad puede propagarse hasta la glándula interdigital, así como también hasta el cuerno del talón, y ocasionar su erosión. La vaca puede experimentar irritación y, ocasionalmente, dolor, pero esto es raramente la causa de renquera por sí sola. El organismo causante es Dichelobacter nodosus, una bacteria anaeróbica.

Pudrición en las patas

La pudrición en las patas es una infección localizada en el espacio interdigital de las patas, que puede propagarse hacia el tejido suave que está por debajo. Los síntomas incluyen lesiones e hinchazones dolorosas en las patas. En casos graves, puede
propagarse hacia el hueso, e incluso deba eliminarse la pezuña. Los organismos patógenos incluyen Fusobacterium necrophorum y Bacteroides melaninogenicus, ambos son anaeróbicos.

Cualquier herida o daño en las patas, incluso si la piel está agrietada o cuarteada por las altas temperaturas y la humedad entre las pezuñas, permite la entrada de organismos patógenos en el tejido. Una vez infectado, el animal puede volverse renco en pocos días, si no es tratado.

La pudrición en las patas puede tratarse limpiando completamente la zona afectada y aplicando un vendaje astringente y antibacteriano. Los casos más graves pueden requerir una terapia sistémica de antibióticos

Las enfermedades microbianas mencionadas anteriormente son causadas por bacterias anaeróbicas que se propagan de una vaca a otra en condiciones ambientales deficientes. Estas incluyen: 1) superficies húmedas y con barro (restos de estiércol); 2) manejo defectuoso de la higiene (no se limpian los pasillos; < 3 veces por día); 3) manejo inapropiado de los echaderos; 4) lotes con barro; 5) salas deficientes; 6) los animales transitan por el cemento o permanecen mucho tiempo sobre él; 7) nuevos animales que no se aíslan del resto del hato; 8) corte inadecuado de las pezuñas o con poca frecuencia (incluidas las vaquillas); 9) estrés; o 10) ausencia de pediluvio o realizado en forma incorrecta.

La prevención de todas las enfermedades microbianas implica mantener las pezuñas limpias y secas según un adecuado manejo de los sistemas de las salas, para así reducir la probabilidad de heridas o daños en las patas. Los pediluvios, si se los realiza apropiadamente, y el uso de sprays tópicos son también una buena práctica para prevenir las enfermedades microbianas.

Fuente: Chuck Gradle, microbiólogo de WestfaliaSurge, Inc.

Tratamiento y prevención

Métodos recomendados vs. métodos no recomendados

Los productores lecheros utilizan una variedad de métodos para controlar y tratar los problemas microbianos en las patas, tales como la dermatitis digital (verrugas peludas). No obstante, se prefieren algunos métodos en vez de otros. Los expertos en la salud de las patas recomiendan las primeras tres opciones de la siguiente lista, y alertan que todo método de control debe efectuarse adecuadamente para lograr su eficacia.

Métodos para controlar y tratar los problemas microbianos en las patas

1. Pediluvio*
2. Aplicación tópica en spray*
3. Tratamiento tópico con un vendaje*
4. Extirpación de la verruga o lesión
5. Eliminación de la verruga (quemándola o congelándola)
6. Antibióticos sistemáticos

*Métodos preferidos

La mayoría de los problemas con pediluvios suceden cuando los productores lecheros no los manejan adecuadamente. Según Richard Wallace, médico veterinario de la Extensión de la Universidad de Illinois, hay cuatro preguntas básicas que todo productor debe plantearse al evaluar la eficacia del pediluvio frente al desarrollo de verrugas peludas.

1) ¿Con qué frecuencia se cambia el pediluvio? Los estudios han demostrado que cuando transitan más de 250 vacas por un pediluvio, su eficacia se vuelve virtualmente sin sentido. Los pediluvios necesitan cambiarse cada 150-250 vacas (según la carga orgánica) para que resulte un medio eficaz de control y prevención de verrugas.

2) ¿Se eliminan los restos de estiércol de las patas antes de ingresar en el pediluvio? Si se deja que una superficie limpia de las patas y los talones reciba contacto directo con la solución de pediluvio, se aumentará la eficacia.

3) ¿Cómo y dónde se posicionan los pediluvios? Los pediluvios necesitan posicionarse de forma que no permita que las vacas permanezcan mucho tiempo en la tina y defequen. Deben colocarse en el pasillo de salida de la sala de ordeño, y las vacas deben transitar sin detenerse.

4) ¿Con qué frecuencia se utilizan los pediluvios? Se debe implementar un programa de pediluvio regular en toda finca lechera. Si se utiliza un pediluvio un día al mes, “no se eliminará el problema”, sostiene el Dr. Wallace. Trabaje con su veterinario para diseñar un programa de pediluvio que funcione en su operación

Para controlar las verrugas peludas, los sprays tópicos requieren menos tiempo y trabajo por vaca que los vendajes en las patas, y pueden resultar particularmente útiles cuando un hato experimenta un problema de renquera a partir de una verruga. Los sprays también funcionan bien cuando las pezuñas se limpian antes de aplicarles el tratamiento. Sin embargo, las desventajas de utilizar sprays en la sala incluyen un ordeño más lento debido a que se interrumpe la rutina normal de ordeño o
a que las vacas no desean ingresar en las salas. Durante los días de la aplicación de spray, puede que haya una reducción en la
producción lechera como consecuencia de la agitación del hato. Además, los sprays tópicos antibióticos usados en la sala pueden llevar restos de antibióticos a la leche.Causas de la renquera Causas renquera 2

No se recomienda eliminar las lesiones en forma quirúrgica para tratar a aquellas vacas que presentan renquera. Las abrasiones de la epidermis provocan que el organismo de la verruga del talón comience una infección. Cualquier tipo de cirugía del tejido de las pezuñas puede ser el ambiente propicio para el ingreso de agentes patógenos (espiroquetas invasivas y organismos bacterianos secundarios).

A menudo, se usan antibióticos sistemáticos como una opción de tratamiento eficaz. Sin embargo, los productores necesitan estar alertas de que el uso de antibióticos sistemáticos para tratar verrugas requiere dosis que superan las indicaciones establecidas en la etiqueta (es decir, uso fuera de lo indicado en la etiqueta), y debe considerarse el tiempo de retirada, así como también el costo.

Está claro que los problemas en las patas pueden originarse en diferentes áreas de la finca, y existen diferentes opciones para tratarlos. Por lo tanto, es necesario que trabaje junto con el veterinario de la finca, el cortador de pezuñas y el nutricionista, para identificar correctamente el origen del problema en las patas y así trabajar en equipo para implementar un protocolo de tratamiento y control adecuado.

Artículo publicado en Entorno Ganadero

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