Liderazgo en tiempo de crisis

José Manuel Arana.

Estos momentos de crisis exigen un liderazgo diferente al que estamos acostumbrados debido a la contingencia global que estamos viviendo. Además de enfrentar un entorno con alta incertidumbre y ambigüedad nuestro propio equipo se encuentra también inmerso en esta disyuntiva donde sus familiares, amigos y círculo social están expuesto, lo que genera miedo, ansiedad y otros sentimientos que disminuyen la creatividad y la velocidad de ejecución.

Por lo que me gustaría iniciar por establecer mi definición de liderazgo de forma muy resumida

El liderazgo es la capacidad directiva que un individuo tiene para persuadir e influir en la forma de ser o actuar de las personas, haciendo que trabajen con entusiasmo hacia el logro de sus metas y objetivos. Es también la capacidad de alinear el propósito personal de cada colaborador al propósito de la empresa logrando mayor productividad en un ambiente de trabajo donde todos quieren trabajar.

En estos momentos el elemento humano debe de “resaltarse”, ya que es a través de la gente que realizamos los resultados por lo que requiere que el líder sepa cuándo hacer pausa y cuándo actuar. En tiempos de contingencia es muy importante tener un buen diagnóstico de las oportunidades para mantener el barco a flote. Hablamos de pausa ya que el entorno es cambiante y requerimos actualizarnos. Estas pausas ayudan a establecer un plan de acción para ejecutar de forma rápida y efectiva. Mucho depende del negocio en el que te encuentres, sin embargo, estos principios se aplican a la mayor parte de las situaciones que se nos presentan como líderes y algunas de las preguntas que nos estamos haciendo son: ¿Voy a reducir costos?, ¿reducir gastos?, ¿aumentar ventas?, ¿dejar de vender una línea de productos?, ¿retrasar los lanzamientos de producto?, ¿cerrar alguna unidad de negocios?, ¿cambiar la mezcla de productos?, ¿reducir el personal?, ¿dejar de vender a algunos clientes?, ¿voy a reducirle el
sueldo parejo a todos?

Cuando las cuatro preguntas que debemos hacernos son:

  • ¿Qué debo dejar de hacer?
  • ¿Qué debo disminuir?
  • ¿Qué debo incrementar?
  • ¿Qué cosas nuevas que no estoy haciendo debería de hacer?

Mi primer consejo es que tengamos muy claro lo que son costos fijos y costos variables. En base a esto debemos de disminuir los costos fijos ya que los ingresos de la empresa han sido afectados por la contingencia. Es recomendable hacer un análisis de los gastos a nivel de detalle para disminuir o cortar.

En el área de clientes y productos es muy importante hacer un análisis tridimensional donde incluyamos rentabilidad y consumo de capital de trabajo como dos variables preferenciales. En estos momentos lo primero que debe gobernar la estrategia no es tanto la rentabilidad sino el flujo muy afectado por el capital de trabajo que utilizamos en nuestra operación Así que temporalmente debemos de invertir esta variable para que flujo lleve la mano sobre la rentabilidad. Ambas son muy importantes.

En este momento es necesario tener la información pertinente del flujo y sensibilizar a todas las áreas de la empresa principalmente a directores y gerentes para identificar las palancas que podemos mover para mejorar la situación de flujo (ejemplo: plazos de proveedores, plazos con clientes, inventario, cartera, cuentas por pagar, líneas de crédito, etc.). Estos momentos son de optimización del negocio y no de maximización de ventas. La venta es importante, sin embargo, es más importante la venta de mayor calidad que optimiza el flujo de efectivo.

Uno de los consejos que daría a los líderes es que tengan comunicación en exceso con su gente y con toda la empresa. En estos momentos el exceso de comunicación no hace mal. Que establezcan un plan de acción con objetivos de corto plazo de semanas o tres meses para que la empresa se enfoque en lo importante y urgente y dejemos otras iniciativas paradas que consumen recursos y tiempo. Una de las cosas más difíciles de hacer es dejar de hacer. Es decir, identificar proyectos, iniciativas que en el periodo de la contingencia las vamos a dejar de hacer. El ser humano por naturaleza quiere hacer todo. Sin embargo, en este momento no hay recursos, ni tiempo para poder sobrevivir. Es muy importante comunicar y hacer conciencia en todos los empleados de la situación de sobrevivencia que vivimos para poder después pasar al plan de acción y enfocar a la gente en no más de tres objetivos a lograr en un plazo corto de tiempo.

El líder/líderes se vuelve una pieza clave en la contingencia ya que la gente quiere verlos en acción ya sea en presencia, en video, en teleconferencia o aunque sea una llamadita por teléfono. La gente quiere tener presencia de sus líderes para sentirse más seguro y para poder actuar con la confianza que requieren estos cambios. Es importante que establezcan una agenda semanal donde la mayor parte de la agenda es estar en comunicación con tu gente.

En estos momentos requerimos ser más empáticos con la gente, escuchar con atención y entender las necesidades de cada uno ya que nuestra gente está viviendo diferentes realidades. Cada familia vive una situación diferente. Algunos tienen un pariente enfermo, otros perdieron un ser querido, otros ya no aguantan el estrés del confinamiento, etc. Todos estamos viviendo un duelo ya que perdimos la libertad, perdimos la movilidad, perdimos nuestra seguridad, y muchas otras cosas más. Este duelo tiene que ser reconocido para poder superarlo y que el equilibrio mental – emocional de la gente mejore y estén aptos para mostrar la mayor productividad, creatividad y lealtad. Por lo que requerimos que el líder sea más humano y tenga un interés legítimo por la salud de su gente.

Durante este proceso observen bien a su gente y determinen quiénes son los buenos líderes y qué tiene impacto positivo en la empresa en estos momentos de crisis. De la misma forma evalúen muy bien al personal de alto desempeño y de bajo desempeño para poder establecer acciones de productividad, involucremos a la gente de alto desempeño y para reducir costos disminuir la plantilla de la gente de bajo desempeño. Al final el liderazgo es una combinación de arte con ciencia, en este momento el lado más corto de los líderes está en la parte del arte ya que seguimos actuando en nuestras competencias con los mismos trucos que aprendimos. El reto es reinventarte para esta crisis y saber cuándo hacer pausa, cuándo actuar y sobre todo cómo actuar. Lo único que no debemos de hacer es navegar sin hacer nada

Artículo publicado en Los Avicultores y su Entorno Junio -Julio 2020

Fernando Puga
Fernando Pugahttps://bmeditores.mx/
Editor en BM Editores, empresa editorial líder en información especializada para la Porcicultura, Avicultura y Ganadería.
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