Agua: ¿Sabe Usted lo que están bebiendo sus aves?

Susan Watkins.
Distinguida Profesora Emérita.
Universidad de Arkansas, División de Agricultura, Servicio de Extensión Cooperativa.

Conferencia en webinar patrocinada por Aviagen.

Fuente: Aviagen.

El agua es el aporte nutriente número uno para la producción de una parvada, sin embargo, la necesidad de calidad óptima puede ser pasada por alto. Tomar tiempo para analizar y evaluar los sistemas de agua y usar esta información para desarrollar un programa específico para el funcionamiento, puede ayudar a reducir los riesgos transportados por el agua como E. coli, estafilococos, Salmonella, cólera y otros. Lo siguiente proporciona comprensión en cuanto a cómo construir un exitoso programa de agua.

1. Analizar el sistema de agua para determinar fortalezas y debilidades.
   1. Realice un análisis de minerales y pH de la fuente de origen del agua. Cada granja tiene un abastecimiento único de agua que incluye lo que ocurre naturalmente en el agua, así como también cómo el sistema incluyendo aditivos del agua, altera la calidad desde la fuente de origen hasta el último bebedero. Algunos contaminantes que suceden naturalmente como hierro, manganeso o azufre pueden promover el crecimiento de patógenos como seudomonas o E. coli, mientras que altos niveles de sodio o cloro causan heces sueltas y problemas en cáscaras de huevos. Elevado pH, calcio y alcalinidad pueden ser tolerables para las aves, pero podrían estar reduciendo la capacidad de las tuberías de agua y dañando las células frías. Y el pH del agua puede afectar la eficacia del desinfectante. Esta información es la base para el desarrollo de un programa que mejor se ajuste al agua.
   2. Inspeccione visualmente el agua y el sistema. Haga una lista de verificación para usar en cada granja y evalúe cuidadosamente el agua desde la fuente hasta las aves. Correlacione los datos de rendimiento con los parámetros de calidad del agua para determinar si hay tendencias significativas en el funcionamiento que puedan ayudar a justificar la colocación de recursos para un programa de agua.
   3. Examine el agua por presencia de bacterias en la fuente de origen y a través de todo el sistema de distribución del agua hasta el mismo lugar donde las aves están bebiendo. Examine los tanques de almacenamiento y después que el agua se ha movido a través de las tuberías de distribución. Siempre saque una muestra de la línea de bebederos, pero use precaución cuando se toma muestras de suministros de agua en el galpón, ya que la exposición descuidada de la muestra al aire o a superficies sucias puede entregar información inexacta. Los resultados pueden ayudar a identificar puntos débiles que pueden necesitar atención especial, i.e. bombeo extra de saneamiento del agua o una completa limpieza entre parvadas. Controlar microbios es una cuestión de números y mientras más bajos los números, es mejor para las estrategias de control diario. Probar para presencia total de bacterias o conteo total en placa (CTP) además de E. coli o coliformes. Una gota de muestra con niveles CTP mayores que 10,000 unidades formadoras de colonia/ml son considerados un nivel preocupante mientras que conteos mayores que 100,000 ufc/ml deben ser considerados inaceptables. Usar hisopos de esponja hidratados estériles también puede ayudar a evaluar el nivel de biopelícula en las cañerías de agua, para determinar el nivel de limpieza. Cuando los hisopos detectan altos niveles presentes de biopelícula, los sistemas de agua necesitan completa limpieza entre parvadas, o cuando no hay aves en el galpón para reducir el desafío. Un concienzudo análisis del sistema de agua ayuda a identificar dónde la aplicación del desinfectante puede ser más beneficiosa.
2. Desarrolle un programa que complemente al agua. Si un análisis del agua indica que el agua contiene hierro o manganeso, puede ser necesario oxidar y luego filtrar el agua para impedir que estos minerales sirvan de alimento a patógenos a lo largo del sistema. Si el pH está sobre 7.5, desinfectantes como dióxido de cloro o peróxido de hidrógeno son una mejor elección que cloro que es más efectivo cuando el pH está bajo 7. Si el agua tiende a ser contaminada fácilmente, entonces puede ser conveniente usar terapéutica de agua, como ácidos orgánicos durante el día y luego cambiar a las aves a agua limpia desinfectada antes de anochecer, así el sistema pasa a inactividad sin nutrientes presentes los que pueden alimentar crecimiento microbiano y causar acumulación de limo. Si el agua tiene un alto pH (>8) y elevada alcalinidad (>100 ppm), las células frías deben ser enjuagadas con frecuencia y posiblemente agregar ácido al tanque de recirculación (mantener pH de 6-7) para ayudar a evitar la formación de escamas minerales.
3. La consistencia es clave para el éxito. Mantenga el equipamiento funcionando en buenas condiciones y no permita que los productos desinfectantes se agoten. Tenga cuidado con el almacenamiento de productos, particularmente blanqueador y dióxido de cloro, los que pueden perder eficacia si se dejan a la luz del sol o se almacenan en áreas calurosas.
4. Monitorear y verificar que el programa está funcionando. Todos los productos desinfectantes pueden funcionar o fallar, por consiguiente, cuando se establezca un programa de agua, es esencial hacer testeos microbianos periódicos para confirmar que los productos están funcionando. También es importante supervisar para confirmar que los niveles de desinfectante son aceptables y están presentes. Los inyectores pueden fallar y un programa de monitoreo consistente puede prevenir lapsos que podrían resultar en florecimiento microbiano.
5. Proporcionar parvadas con agua de óptima calidad debe ser parte de la cultura de la compañía. La experiencia sustenta que las compañías más exitosas son las que entregan un consistente mensaje desde la gerencia superior hasta el cuidador diario de las aves. Si el equipo de producción ve que los que toman las decisiones son serios y están interesados en proveer aves con buena agua, ellos seguirán al líder. A medida que las compañías desarrollan programas de agua, la gerencia debe mantener al equipo responsable por evaluaciones y monitoreos o el programa está condenado al fracaso.

La Receta de Agua de Watkins se puede resumir de acuerdo a lo siguiente:

• Aceptar agua potable puede crear riesgos para las parvadas
• Evaluar sistemas e identificar y cuantificar los contaminantes del agua tales como minerales, pH y bacterias.
• Preparar una estrategia para reducir o eliminar los desafíos.
• Usar limpieza de líneas de agua entre parvadas para minimizar desafíos cuando sea necesario.
• Utilizar un desinfectante diario de agua que mejor se ajuste a la operación.
  • Fácil de usar.
  • Fácil de monitorear.
  • Costo efectivo en el esquema de cosas.
  • Si usted cree en el valor de un programa de agua, así lo creerá su gente.